La colección de Chiyo, capturada en un elegante blanco y negro, ofrece una mirada íntima a la sensualidad y el juego de la seducción. Cada imagen es una pincelada de luz y sombra, donde la piel se convierte en lienzo y las poses en poesía visual.
El erotismo se eleva a través de la sutileza. No se trata de la mera exhibición, sino de la sugestión, de la promesa que reside en una mirada, en la curva de un cuerpo, en el delicado encaje que apenas oculta.
El ‘情趣’ (qíngqù) chino, que podría traducirse como ‘interés amoroso’ o ‘atractivo erótico’, se manifiesta en cada detalle. La lencería, lejos de ser un simple adorno, se convierte en un elemento clave para despertar la imaginación y encender la pasión.
Las sombras danzan sobre la piel, creando una atmósfera de misterio y deseo. El blanco y negro intensifica las emociones, eliminando distracciones y centrando la atención en la belleza natural de Chiyo.
Esta colección no es solo una serie de fotografías, sino una experiencia sensorial que invita a explorar las profundidades del placer y la sensualidad. Es un tributo a la feminidad, a la confianza en uno mismo y al poder del juego erótico.
